La caída del precio de los fertilizantes ayuda a los productores brasileños de soja y café

Por Ana Mano

SAO PAULO, 11 abr (Reuters) – Los agricultores brasileños se están beneficiando este año de una caída de los precios de importación de fertilizantes, después de que las sanciones impuestas en 2022 a los principales productores, Rusia y Bielorrusia, hicieran temer una escasez mundial de suministros.

Según los analistas, los productores brasileños de alimentos como el café y la soja vieron aumentar su poder adquisitivo para insumos como la urea y la mezcla de fertilizantes NPK, que contiene nitrógeno, fósforo y potasio en diferentes proporciones.

Los agricultores del estado de Mato Grosso, por ejemplo, necesitaron el equivalente a 17,19 bolsas de 60 kilos de soja para comprar una tonelada de fertilizantes NPK en la última semana de marzo, según los precios recopilados por Argus Media, con sede en la zona de Rondonópolis.

Aunque esta cifra es 0,7 sacos por tonelada superior a la de finales de febrero, es muy inferior a los 27,44 sacos por tonelada de hace un año, según los datos.

En el caso del café arábica de Brasil, el aumento de los precios internacionales del café y la reducción de los costos de los fertilizantes nitrogenados significan que los agricultores necesitarían ahora el equivalente a 1,8 sacos de café para comprar una tonelada de urea, la proporción más baja en 8 años, según datos de la consultora de agronegocios Agrinvest.

Jeferson Souza, analista de Agrinvest, dijo que todos los agricultores nacionales se están beneficiando de la caída de los precios de los fertilizantes, incluso cuando el precio de materias primas como la soja, de la que Brasil es el mayor exportador mundial, cayó en los últimos días.

Dijo que esto significa que es probable que los agricultores aumenten las aplicaciones.

El gobierno brasileño quiere reducir la dependencia del país de las importaciones de fertilizantes.

Esta postura ya ha reavivado el interés por un proyecto de extracción de potasa en el Amazonas, mientras se desarrolla una nueva mina de fosfatos en el sur de Brasil.

La empresa estatal Petrobras también podría reanudar grandes proyectos de fertilizantes nitrogenados.

Los fertilizantes representaron el 49% del costo de producción de la cosecha de soja de 2022/23 en Mato Grosso, pero esa cifra caerá al 46% en la próxima temporada, dijo Argus, citando datos del instituto de investigación Imea, respaldado por los agricultores.

(Reporte de Ana Mano; Editado en Español por Ricardo Figueroa)