Los mercados europeos se enfrentan a una jornada incierta el martes después de que Wall Street y las bolsas asiáticas hayan operado con angustia y reportado fuertes caídas el lunes y la madrugada del martes.
El miedo es palpable frente al avance del coronavirus fuera de china. Mientras Shanghai ha reportado 508 nuevos casos y 71 muertes, Corea del Sur ha reportado 60 nuevos pacientes para un total de 893 personas diagnosticadas con el COVID-19. En Irán, 61 personas han sido confirmados como contagiados, mientras 20 han muertos. El Italia, el número de fallecidos asciende a siete.
Ante el panorama anteriormente descrito, los mercados temen que la parálisis china se extienda a otros países del mundo. Las grandes agencias de noticias y páginas de información más populares del mundo se están centrando en la ruptura de la cadena de producción y la escasez de productos fabricados en china en el resto del mundo.
Sin embargo, un mayor impacto también recaerá en el gasto del consumidor y por ende en la demanda doméstica de cada país afectado.
Ya sucede en China, cuyo país está prácticamente acuartelado y sus habitantes no salen de sus casas. Solo pensar que la segunda economía mundial tiene ese nivel de parálisis es preocupante.
Ahora bien, pensemos los efectos que pueden causar en Italia, donde ya partidos del calcio italiano se han suspendido por temor al coronavirus, Corea del Sur que mantiene su alerta en máximos o Japón, cuya sobrepoblación marcaría también un peligro constante para los que se muevan o entren en el metro por ejemplo.
Además, con la paranoia existente tanto en oriente como en occidente, los casos se pueden multiplicar con el exceso de cuarentenas innecesarias en recinto sin condicionamiento alguno.
De momento, empresas de todo el mundo siguen informado que sus negocios están siendo impactados por el coronavirus. La última fue Mastercard, que publicó una nota de alerta en el que menciona al coronavirus como un peligro para las ganancias de este año.
¿La razón? El impacto del virus en la movilidad mundial y el comercio internacional.
Por otro lado, según ha reportado el Global Times, a universidad de Tianjin ha informado de que ha desarrollado una vacuna oral contra el COVID-19, aunque obviamente aun faltan por desarrollar las pruebas clínicas.
Para hoy martes, los traders que operan la sesión europea deben prestar atención al producto interior bruto alemán y al clima de negocios francés. Más tarde, Estados Unidos publicará el índice de precios de viviendas y el sentimiento del consumidor.
Por otro lado, ponga atención a los niveles de venta de los bonos de Estados Unidos, cuya emisión a 30 años está operando a su mínimo histórico, mientras que el de 10 años está moviéndose a niveles que se vieron con el Brexit.
Según expertos, esta dinámica podría estar siendo una señal de que EEUU se verá forzado a poner tipos de interés negativos, como los que en estos momentos existen en la eurozona y Japón.
Esta especulación podría ser el factor que está empujando al dólar a la baja y conteniendo el oro de continuar con su escalada.
De momento, el euro está disfrutando de esa situación y está recuperando terreno frente al dólar. El EUR/USD está operando positivamente por tercera sesión consecutiva y ya está operando sobre el 1.0860.
La resistencia inmediata está situada en 1.0880, y después 1.0925. El soporte está en 1.0775, y aunque el gráfico está mostrándose favorable a un cambio de dirección, el movimiento es aún muy débil como para ser considerado.
Dicho esto, lo que está sucediendo con los bonos del Tesoro de Estados Unidos puede ser un indicador claro de un posible cambio de tendencia.
Mauricio is a financial journalist with over ten years of experience in stocks, forex, commodities, and cryptocurrencies. He has a B.A and M.A in Journalism and studies in Economics by the Autonomous University of Barcelona. While traveling around the world, Mauricio has developed several technology projects focused on finances and communications. He is the inventor of the FXStreet Currency Poll Sentiment index tool.