Los principales índices bursátiles estadounidenses terminaron la semana con ganancias, registrando la subida semanal más grande de los últimos seis meses. La subida fue impulsada por la decisión del Banco Popular de China de inyectar una cantidad generosa de liquidez en sus mercados financieros, por la esperanza de que pueda evitarse un desastre económico a causa del coronavirus y por unos datos económicos positivos en EEUU que mandaban al S&P 500 y al NASDAQ Composite hasta nuevos máximos históricos.
La semana pasada en el mercado al contado el índice de referencia S&P 500 se liquidaba en 3327.71, subiendo un 2.1%. El promedio industrial del Dow Jones terminaba en 29102.51, subiendo un 3.0% y el NASDAQ Compuesto basado en el sector tecnológico cerraba en 9520.51, subiendo un 4.0%.
Esta semana los traders estarán pendientes de cualquier tipo de noticia que confirme el impacto que está teniendo el coronavirus sobre la economía. El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, tiene programado comparecer frente al Congreso el martes y el miércoles. Los datos de inflación en EEUU se publicarán el jueves. El viernes cuando termine la semana se publicarán los informes de ventas al por menor y de sentimiento del consumidor.
En cuanto a los beneficios empresariales llegamos a una semana en la que el 13% de las empresas del S&P 500 publicarán sus resultados del cuarto trimestre, por lo que va disminuyendo la cantidad de empresas que lo hacen.
Al llegar al cierre del viernes más de 300 empresas del S&P 500 habían publicado ya sus resultados del cuarto trimestre, de las cuales más del 70% mostraban unos resultados que superaban a las expectativas según los datos del sistema IBES de Refinitiv. Se espera que los beneficios empresariales hayan crecido un 2.1%.
Los analistas de Edward Jones, citando a Factset, decían lo siguiente, “En 2019 las acciones registraron el mejor rendimiento de los últimos seis años, con las de mayor capitalización subiendo un 32% gracias a un crecimiento sólido de sus beneficios y unos precios más moderados al acercarse este año nuevo. Desde ese momento el crecimiento de los beneficios ha ido desacelerándose, y el valor de las acciones de mayor capitalización ha superado sus promedios a cinco y diez años.”
“Dos tercios de las empresas ya han publicado sus resultados empresariales hasta el momento y parece que en general los beneficios van a ser mejores de lo que se había pronosticado. Esperamos que el crecimiento de los beneficios aumente hasta tasas de crecimiento en torno al 5%, una cifra más parecida a los promedios históricos. Los beneficios empresariales sólidos y los datos fundamentales a nivel económico ayudarán a mantener en pie este mercado alcista y a que continúe aumentando el precio de las acciones a pesar de que en algún momento puedan producirse retrocesos durante el año, aunque bajo nuestro punto de vista deberían tener una duración corta.”
El viernes pasado la Reserva Federal publicaba en el Congreso su informe anual en el que decía que el coronavirus podía tener un impacto negativo en el crecimiento global debido al tamaño de la economía china y al alcance global de la pandemia que ha limitado los viajes internacionales, ha hecho que se cierren empresas y ha bloqueado las cadenas de suministro un mes después de que se reportara el primer caso anteriormente en el año. La semana pasada los mercados de bonos reflejaban un aumento de la preocupación de los inversores ya que el rendimiento a 10 años caía por debajo del 1.6% a pesar de un informe sólido sobre el empleo.
Es cierto que las acciones se liquidaron a la baja el viernes pero está claro que no fue porque los datos del mercado laboral fuesen decepcionantes. El informe sobre el empleo de enero mostró que la economía fue capaz de crear 225.000 nuevos trabajos, batiendo con facilidad los pronósticos. La tasa de desempleo subía ligeramente pero por un motivo que no era negativo en sí mismo ya que los trabajadores volvían a sentirse atraídos hacia el mercado laboral por un aumento en los salarios, algo que podía comprobarse por el aumento de la tasa de participación en el empleo hasta el 63.4% que era la cifra más alta desde 2013.
El informe no era perfecto y mostraba que el sector manufacturero perdió trabajos y que el aumento de los salarios se situó en el 3.1% a nivel interanual, por debajo del promedio a 50 años que es del 4%.
No obstante las cifras deberían ser lo suficientemente buenas como para continuar respaldando el gasto del consumidor y el crecimiento económico durante el 2020.
James A. Hyerczyk ha trabajado como analista fundamental y técnico de los mercados financieros desde 1982. James comenzó su carrera en Chicago como analista de mercado de futuros para CBOT y CME y ha estado ofreciendo análisis de calidad para traders profesionales durante 36 años. Su trabajo técnico utiliza las técnicas de análisis de patrón, precio y tiempo de W.D. Gann. James tiene un Máster en Administración de Empresas de la St. Xavier University y un Máster en Mercados Financieros y Negociación del Instituto de Tecnología de Illinois.