WASHINGTON (Reuters) - Los empleadores en Estados Unidos contrataron a muchos menos trabajadores de lo esperado en abril, posiblemente ante la frustración por la escasez de mano de obra, lo que los pone en dificultades para cumplir con la demanda interna a medida que la economía reabre por la rápida mejoría de la situación sanitaria.
Por Lucia Mutikani
El informe del Departamento del Trabajo del viernes, que mostró un desplome en los empleos temporales de servicio doméstico -una medición sobre las futuras contrataciones-, además de declives en el empleo en manufacturas y minoristas, podría generar más críticas sobre las generosas ayudas fiscales.
Los beneficios para desempleados, reforzados por la emergencia pandémica, incluyen un suplemento semanal de 300 dólares a la semana que deja un monto superior a los empleos de salario mínimo.
Los subsidios por desempleo fueron extendidos como parte del enorme plan de rescate por la pandemia del COVID-19, por un monto de 1,9 billones de dólares y fue aprobado por el Congreso en marzo.
Las nóminas no agrícolas aumentaron a nivel nacional solo en 266.000 posiciones nuevas el mes pasado, luego de crecer en 770.000 en marzo en lugar de la cifra de 916.000 puestos informados al inicio, dijo el Departamento del Trabajo en su reporte mensual de empleo, que es observado de cerca por los mercados por su importancia para la política monetaria.
Economistas encuestados por Reuters esperaban que las nóminas avanzaran en 978.000 empleos.
El informe dejó al país con 8,2 millones de empleos menos que el máximo histórico de febrero del 2020. El reporte de empleo, el primero desde que la Casa Blanca lanzó su rescate por la pandemia, probablemente hará poco por cambiar las expectativas de que la economía ingresó con paso firme al segundo trimestre y va en camino a anotar su mejor desempeño en 2021 en casi cuatro décadas.
“Muchos verán las débiles cifras del mes pasado como una confirmación de que los beneficios por desempleo extraordinarios están afectando la disponibilidad de trabajadores”, dijo Curt Long, economista jefe de la National Association of Federally-Insured Credit Unions.
Las acciones abrieron mixtas en Wall Street. El dólar caía contra una cesta de monedas pares y los precios de los bonos del Tesoro estadounidense a largo plazo bajaban.
La tasa de desempleo aumentó a 6,1% en abril desde 6% de marzo. Los niveles de desocupación pueden estar alterados porque las personas se autodescriben muchas veces como “empleado pero ausente del trabajo”.
Millones de estadounidenses siguen estando sin trabajo y muchos han perdido sus puestos de forma permanente debido a la pandemia.
Desde las fábricas hasta los restaurantes, los empleadores están buscando trabajadores frenéticamente. Una serie de factores, como padres que todavía están en casa porque deben cuidar de sus hijos, retiros vinculados al coronavirus y los generosos cheques de ayuda fiscal, podrían ser responsables por la escasez de mano de obra.
El ritmo moderado de la contratación podría extenderse al menos hasta septiembre, cuando los actuales beneficios extraordinarios del Gobierno pierdan vigencia.
Otro reporte del Gobierno informó el viernes que los inventarios mayoristas del país aumentaron un 4,6% en marzo respecto al mes anterior, por encima de las previsiones del mercado de un alza de 1%.
(Reporte de Lucia Mutikani. Editado en español por Marion Giraldo)
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