El Paquete de Estímulos de 2 Billones de Dólares Parece Mucho Dinero pero Es Mucho Menos del que Hará Falta

Menudos cambios a habido en 10 años. Hace una década el gobierno de EEUU rescató a los bancos más importantes con una ayuda de 750 mil millones de dólares, dentro de un programa de medidas conocido como Programa de Alivio de Activos Problemáticos (TARP por sus siglas en inglés). Y si lo he entendido bien se detuvieron en 750 mil millones de dólares porque un billón de dólares no sonaba bien y hubiera atraído demasiada atención de los políticos y de los contribuyentes.

Si volvemos a 2020 los legisladores han decidido inyectar 1 billón de dólares a la velocidad del rayo y luego pasaron a los 2 billones. Es posible que al acabar el año lleguen a los 5 billones.

Un problema que hubo con el TARP es que el gobierno simplemente entregó el dinero a los bancos pero no les dijo que tenían que hacer con él. ¿Se devolvió a los acreedores hipotecarios que tenían casas con un valor devaluado? No. ¿Se rescató a algún ciudadano estadounidense? A parte de ejecutivos de bancos creo que tampoco.

Hoy la mayoría de americanos sigue pagando por la crisis financiera de 2008 y 2009. En la mayor parte del país el precio de la vivienda no ha vuelto a los niveles anteriores al 2008. Las acciones se han disparado pero los americanos no han participado en esa subida.

Se han creado muchos empleos durante la expansión de los últimos 12 años y los políticos de Washington están intentando hacerlo lo mejor que pueden para garantizar que los trabajadores van a estar respaldados durante esta crisis. Esperan que las empresas que reciban parte de la ayuda del gobierno la utilicen para pagar a sus empleados. Esperan que los que ya han sido despedidos reciban las prestaciones por desempleo suficientes como para sobrevivir a la crisis del coronavirus.

Esperemos lo mismo porque el consumo interno es clave para la economía de EEUU y las numerosas cuarentenas y bloqueos que se han impuesto hacen que posiblemente tenga que pasar un tiempo hasta que la gente pueda salir y gastarlo. Esperpemos también que parte de los americanos que están en una situación más favorable no traten el regalo del gobierno como si fuera dinero gratuito y lo acaben quemando comprando lotería.

Esperemos que todo el mundo gaste el dinero de forma apropiada. Durante el huracán Katrina a los afectados se les dieron tarjetas de débito con 2000$ que terminaron distribuidas por todo el país, en lugar de estar en Luisiana que es donde hacía falta reanimar a la economía. Durante la crisis financiera el dinero del gobierno fue a parar a manos de aquellos que en realidad no lo necesitaban.

El huracán Katrina sucedió porque la madre naturaleza así lo decidió, sin embargo la crisis financiera fue causada por la avaricia del hombre. La crisis del coronavirus parece ser una combinación de causas naturales y malas decisiones del hombre.

Por tanto tiene sentido que el nuevo plan de estímulos del gobierno esté diseñado para apoyar al americano medio y a unas pocas empresas importantes. Sobre el papel parece un acuerdo equilibrado, pero siempre lo parece hasta que los particulares y las empresas empiezan a encontrar sus lagunas.

¿Es el dinero del plan de estímulo suficiente para apoyar a la economía? Se espera que el estado de Nueva York reciba 3.8 mil millones de dólares, de los cuales 1.3 mil millones de dólares serán para la ciudad de Nueva York.

El gobernador de Nueva York, Cuomo, dijo que “Parece mucho dinero. Pero está muy por debajo de la caída de ingresos que van a tener que soportar los proyectos del estado”, que según dijo el gobernador podría llegar a los 15 mil millones de dólares.

“Esa cantidad es como una gota en el océano si lo comparamos con lo que necesitan los ciudadanos de Nueva York,” dijo. “¿Cómo tapas un agujero de 15 mil millones de dólares con 3.8 mil millones de dólares? No puedes.”

Dar dinero gratis a los contribuyentes y a las empresas es genial, incluso aunque solo sea para tener seguridad durante algunos meses. Aunque al igual que está pasando con la respuesta médica de EEUU frente al coronavirus, parece que la respuesta fiscal también se está quedando por debajo de las expectativas.