Las materias primas y las divisas cerraban con pérdidas la sesión del lunes, lo que probablemente se deba a la gran fortaleza del dólar estadounidense. Un dólar al alza suele hacer que baje la demanda externa de activos denominados en dólares como el oro o el petróleo crudo. Este, junto a otros factores, probablemente contribuyó a que hubiese caídas por encima del 2% durante el lunes. El dólar estadounidense ganaba atractivo como inversión por el diferencial positivo que hay en las tasas de interés ofrecidas debido a la mejora de los datos económicos en EEUU y al aumento de las probabilidades de que la Fed no aplique ningún recorte en octubre.
El principal responsable de la subida del dólar frente a un grupo de divisas era el euro. El motivo es que el euro representa el 57% del índice del dólar.
En la sesión del lunes el euro caía contra el dólar estadounidense hasta su nivel más bajo en los últimos 28 meses. La preocupación sobre el crecimiento en la zona euro castigaba a la moneda única debido a que la inflación anual en Alemania se frenaba de forma inesperada por tercer mes consecutivo en septiembre, según datos publicados el lunes. Por otra parte el dólar se beneficiaba de la demanda estacional y de la incertidumbre que surge de la guerra comercial entre EEUU y China, ya que es considerado un valor seguro en tiempos difíciles.
Los institutos económicos más importantes de Alemania también han revisado a la baja sus pronósticos de crecimiento en la economía más grande de Europa para este año, según comentaban a Reuters el lunes dos fuentes que conocían la decisión.
La demanda de dólares hacia el último trimestre del año también está impulsando a la divisa norteamericana. Según Bipan Rai, director norteamericano de la estrategia de forex para CIBC Capital Markets, “En el último trimestre del año solemos ver una demanda elevada de dólares estadounidenses, por lo que el hecho de que el par Euro/Dólar sea el que se negocia de forma más frecuente en el mercado de divisas nos lleva a pensar que el euro podría continuar cayendo de aquí en adelante.”
Parte de la fortaleza del dólar se atribuye a la elevada demanda de activos seguros en momentos de incertidumbre. Esta demanda viene impulsada por la incertidumbre alrededor de la petición de destitución del presidente Donald Trump y por el nerviosismo general que hay antes de que empiecen las negociaciones comerciales entre EEUU y China los días 10 y 11 de octubre.
El dólar estadounidense también recibe el respaldo de una Fed dividida ya que varios miembros clave del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC por sus siglas en inglés) sugerían la semana pasada que el banco central podría tener que pausar el programa de recortes de tipos en su reunión a finales de octubre.
En septiembre la Fed recortó los tipos de interés por segunda vez en dos meses, pero las últimas predicciones de los miembros de la Fed mostraban una gran división en cuanto a la necesidad de introducir más recortes. Cinco querían recortes superiores, cinco no querían ningún recorte y otros siete estaban contentos con la decisión de la Fed.
El 26 de septiembre el vicepresidente de la Fed, Richard Clarida, dijo que las expectativas de inflación en este momento van acorde al objetivo del banco central del 2%, lo que indica que él no ve la necesidad de presionar para que se introduzcan recortes adicionales que impulsen la inflación.
Y también la semana pasada el presidente de la Fed de Dallas, Robert Kaplan, decía que a pesar de que la economía mundial estuviese atravesando un periodo “frágil”, las probabilidades de que se produzca una recesión en EEUU el año que viene continuaban siendo “relativamente bajas.”
Hablando en general, mientras el dólar estadounidense se mantenga fuerte los activos denominados en dólares como el oro o el petróleo crudo van a tenerlo complicado para encontrar compradores de países que no utilicen el dólar como divisa nacional, lo que debería limitar las ganancias. Además la ampliación del diferencial entre los rendimientos de los bonos del gobierno estadounidense y de otros rendimientos de bonos en otros países como Alemania, Reino Unido o Japón, también continuará haciendo del dólar un activo más atractivo.
James A. Hyerczyk ha trabajado como analista fundamental y técnico de los mercados financieros desde 1982. James comenzó su carrera en Chicago como analista de mercado de futuros para CBOT y CME y ha estado ofreciendo análisis de calidad para traders profesionales durante 36 años. Su trabajo técnico utiliza las técnicas de análisis de patrón, precio y tiempo de W.D. Gann. James tiene un Máster en Administración de Empresas de la St. Xavier University y un Máster en Mercados Financieros y Negociación del Instituto de Tecnología de Illinois.