En su reunión de la semana pasada, los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus aliados decidieron no realizar cambios a su plan de incrementar la producción en 400.000 barriles diarios todos los meses, a pesar de las presiones que han recibido de grandes consumidores de petróleo crudo y sus derivados.
En semanas recientes, Estados Unidos, India y Japón se han manifestado vehementemente ante la necesidad de que los países de la OPEP incrementen sus niveles de producción para satisfacer el incremento de la demanda y así reducir el incremento de los precios que pudiera poner en riesgo la recuperación económica.
Sin embargo, los representantes de Arabia Saudita y Rusia, entre otros, han manifestado que el plan actual es el indicado para restablecer el equilibrio en el mercado petrolero.
Uno de los argumentos de los representantes de la OPEP es que el crecimiento experimentado por la demanda en semanas recientes continúa siendo vulnerable porque las restricciones impuestas durante la pandemia no podrían ser totalmente levantadas mientras exista riesgo de incremento de los casos en la mayoría de los países.
El ministro de energía ruso comentó que “la caída del consumo de combustible en Europa durante el mes de octubre refleja que la demanda todavía continúa presionada por el incremento de los casos de la variante Delta del Covid-19, por lo que nuestra estrategia de incrementar gradualmente la producción es acertada”
Adicionalmente, Suhail Al Mazrouei, ministro de energía de los Emiratos Árabes Unidos, dijo que “esta estrategia nos permitirá alcanzar un balance en el mercado durante el primer o segundo trimestre del próximo año”
Según el comité técnico de la OPEP, el mercado petrolero solamente presentará un déficit de oferta de 300.000 barriles diarios durante el cuarto trimestre del año, por lo que la cautela de los productores estaría justificada.
Países como India, Japón y Estados Unidos, continúan preocupados porque el incremento de los precios del crudo y sus derivados podría generar una disminución de la demanda y debilitar el crecimiento económico.
Luego de la decisión de la OPEP, la Casa Blanca manifestó que utilizarán “todas las herramientas a su disposición” para proteger la economía.
Analistas de UBS consideran que “la decisión de la OPEP implicaría que Estados Unidos haga uso de las reservas estratégicas de crudo para crear sobreoferta en el mercado y lograr una caída del precio”. Sin embargo eso solamente “tendrá un efecto temporal sobre el precio”, por lo que mantienen su estimado de $90 por barril de crudo Brent para los próximos meses.
El banco de inversión Goldman Sachs coincide con los analistas de UBS en cuanto al “efecto temporal de la liberación de parte de las reservas estratégicas” sobre los precios.
Por otro lado y con una visión menos cortoplacista, el estratega Ed Morse de Citigroup argumenta que “el próximo año tendremos una gran sorpresa en términos de crecimiento de la oferta, sobre todo de países no pertenecientes a la OPEP, incluyendo Estados Unidos”
Estas estimaciones de Citigroup coinciden con las de la OPEP y son una de las razones por las que la organización no ha querido incrementar en exceso la producción, porque de hacerlo tendrían que recortarla nuevamente en pocos meses.
Sócrates se graduó en la universidad y enseguida comenzó a trabajar cubriendo el mercado de acciones de Estados Unidos, México, Brasil, Argentina y Venezuela. A medida que avanzó en su carrera profesional administró fondos mutuales, fondos de retiro y carteras institucionales. Además, fue trader de bonos de deuda de mercados emergentes para carteras propietarias. Sócrates fue CFA charterholder durante 14 años, pero actualmente no es miembro activo del CFA Institute. También es Financial Risk Manager, certificado por Global Association of Risk Professionals.